Rafael Pascual García

Historia suele ser una disciplina poco atractiva e impartida en los centros casi por obligación. Partiendo de mi propia experiencia preacadémica, académica y posacadémica, creo fundamental llamar la atención del alumno y evitar las largas horas aburridas e inútiles de un profesor monologista y el alumno grabadora. Lo más importante para no solo aprobar Historia sino avanzar en ella es entenderla y sobretodo perderle el miedo/asco, por ello yo como profesor me encargo de «vender» la Historia, hacerla popular al alumno y despertar su curiosidad, para luego guiarle indicándole los puntos básicos de los que partir para el aprobado de la asignatura como mínimo, pero casi seguro dejar un germen de curiosidad para el futuro, ya sea aficionado o profesional.