Eva Ordóñez Martín

Mis clases son dinámicas, siempre enfocadas en que sean amenas y que sobre todo despierten el interés de la alumna/o.
Son individuales porque cada chico/a tiene su ritmo y su personalidad y el trato ha de ser personalizado si queremos que la clase sea efectiva.
Me baso en los métodos de las escuelas Waldorf y Montesori porque respetan la forma natural de aprendizaje en función de las edades de las que se trate.
Presentándoles la materia de modo que sus sentidos estén involucrados en ésta, la respuesta que se obtiene es infinitamente mas positiva que cuando permanecen sentados una hora seguida escuchando la típica lección.
Trabajo de una forma sensorial, utilizando fichas, canicas, ábacos y juegos entre otros muchos con los que experimentar la enseñanza que se está impartiendo. De ese modo la comprensión del tema consigue ser más profunda.
Por último, no sólo es tenida en cuenta la materia en cuestión. Fomentar la autoestima, la autoconfianza, y los valores es el principal objetivo de cualquier clase.
Está más que demostrado que trabajar en éstos ámbitos desde pequeños asienta unas bases que duran toda la vida. Si el niño/a, por ejemplo, se siente capaz de solucionar un problema matemático, porque cree en él/ella, ya tiene más de la mitad del éxito logrado.
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