Alba Blanco Moreno

Tengo experiencia cuidando a un niño y apoyándolo en sus estudios de primaria. Durante ese tiempo, no solo me encargué de acompañarlo en sus tareas escolares, sino también de brindarle un espacio donde pudiera aprender con confianza y sentirse seguro para expresar sus dudas. Trabajamos juntos en materias como matemáticas, lenguaje, ciencias e incluso en la organización de su tiempo y hábitos de estudio.

Mi dinámica de clases es flexible, clara y pensada para hacer del aprendizaje una experiencia positiva. Me gusta que las clases sean fáciles de entender, entretenidas y adaptadas al ritmo de cada niño. Para eso, utilizo juegos didácticos, materiales visuales, ejemplos cotidianos y ejercicios prácticos que despierten su curiosidad. Siempre busco maneras creativas de explicar los contenidos, y si algo no queda claro, lo intento desde otra perspectiva hasta que el niño lo entienda sin frustrarse.

Además, me esfuerzo por crear un ambiente de confianza, donde el niño se sienta cómodo y motivado. Creo que aprender no debe ser una carga, sino una oportunidad para descubrir nuevas cosas, desarrollar habilidades y ganar seguridad en uno mismo. Por eso, también me enfoco en reforzar su autoestima y celebrar cada pequeño logro.

Considero que la paciencia, la empatía y la constancia son fundamentales en este tipo de acompañamiento. Me tomo el tiempo de escuchar al niño, entender cómo se siente y ajustar el ritmo de trabajo según sus necesidades del momento. También me gusta mantener una buena comunicación con los padres o tutores para compartir avances, inquietudes o sugerencias.

Estoy muy interesada en seguir desarrollándome en este tipo de trabajo, porque disfruto mucho colaborar en la formación académica y emocional de los niños. Acompañarlos en su crecimiento, ver sus progresos y ayudarlos a confiar en sus capacidades es, sin duda, una experiencia muy enriquecedora