Candela Naranjo

Me rijo por el trabajo bien hecho y la retroalimentación positiva con mis alumnos. Velo por su comodidad durante la enseñanza para recoger frutos en el futuro. Es muy importante que sean amenas y didácticas para que muestren mayor interés. La comunicación con ellos es algo primordial para el buen funcionamiento de la clase.
Imparto clases desde 2019 para niños entre ocho y dieciséis años. Nunca he tenido absolutamente ningún problema y siempre me he sentido bienvenida por ellos. Al final es inevitable cogerles mucho cariño tras meses con ellos, lo que hace las despedidas un tanto difíciles. Sin embargo, adoro mi trabajo y servir de ayuda para quienes más lo necesitan. La mayoría de las veces no se trata de alumnos con mejor aptitud, sino de materias mal enseñadas. No obstante, todo tiene solución y a por ello vamos.
Me sentiría muy agradecida en el caso de que confiaran en mi para enseñar a sus hijos, así no solo aprenderán ellos, sino que será un aprendizaje mutuo y sano.
Estoy disponible en cualquier momento y hora y siempre facilito mi teléfono por si en caso de una ayuda extra tuvieran que recurrir a escribirme un mensaje. No me importuna absolutamente para nada, me gusta mantener una relación natural con ellos y que me vean como una compañera y amiga que les va a a ayudar en lo que pueda y necesiten.
Muchas gracias por su atención y tiempo, les prometo que no se arrepentirán.
¡Viva la enseñanza!
Candela Naranjo.