Danaé Fonseca

Mi experiencia dando clases en España, Francia y México me han permitido adaptarme a diferentes contextos y niveles de enseñanza. En las clases particulares depende mucho del objetivo del estudiante, ya sea pasar un examen, una certificación o ir a vivir a un lugar donde se hable otro idioma y de la edad del estudiante por lo que creo que hacer un plan personalizado es lo primero. Al mismo tiempo, las clases tienen que ser interesantes y mantener el nivel de atención por lo que se debe distribuir muy bien el tiempo de clase. Además es importante mantener una revisión constante del progreso y avances para que profesora y estudiante tengan una idea de lo que es necesario reforzar y de lo que se ha avanzado. A nivel grupal la dinámica en conjunto es diferente de las clases personalizadas, se requiere homologar el nivel de los estudiantes y para ello se van construyendo conocimientos generales en común para a partir de ahí crear una mejora de las habilidades de todos los estudiantes. Es otra forma de aprendizaje que se nutre también de aprender con los demás y de los demás. En ambos casos es fundamental la organización, constancia y sobre todo disfrutar las clases. Para que el aprendizaje sea significativo es necesario que sea una experiencia que se recuerde y en la que se comprometan todas las habilidades disponibles tanto de alumnos como de maestros y así poder avanzar en la inmersión de un nuevo lenguaje y de una nueva cultura.