Llevo dando clases extraescolares de idiomas desde que he tenido la capacidad para ello, tanto de inglés como de francés, alemán e, incluso, español. Esta motivación por ayudar a otras personas a conocer y amar un idioma me llevó el año pasado a comenzar mis andaduras en la enseñanza de idiomas, marchándome a Francia para ser profesora de español en institutos. Ha sido una experiencia muy grata q...
Llevo dando clases extraescolares de idiomas desde que he tenido la capacidad para ello, tanto de inglés como de francés, alemán e, incluso, español. Esta motivación por ayudar a otras personas a conocer y amar un idioma me llevó el año pasado a comenzar mis andaduras en la enseñanza de idiomas, marchándome a Francia para ser profesora de español en institutos. Ha sido una experiencia muy grata que pienso continuar muchos años y que, además, me ha dado más tablas.
Mis clases se centran principalmente en los alumnos a los que enseño, sus necesidades y, además, en sus gustos, pues no concibo enseñar un idioma sin que las otras personas estén contentas y a gusto con lo que están haciendo. Son ellos y ellas los que me marcan el ritmo de las clases y quienes me indican qué quieren o qué necesitan, pues no es lo mismo estudiar un idioma para aprobar un examen o una asignatura que estudiarlo para marcharnos a un país donde lo hablan a vivir. Según sus intereses y necesidades, yo preparo las clases para que se adapten lo mejor posible.
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