La paciéncia es la madre de la ciencia y si crees que las matemáticas y la física son imposibles: paciéncia y, sobretodo, constancia.
En las clases de apoyo podemos revisar los contenidos préviamente vistos en clase, trabajar con los deberes y centrarnos en aquellas partes del temario que puedan resultar más costosas al/la estudiante en concreto.
Para aprender hay que comprender. ¡Así que no de...
La paciéncia es la madre de la ciencia y si crees que las matemáticas y la física son imposibles: paciéncia y, sobretodo, constancia.
En las clases de apoyo podemos revisar los contenidos préviamente vistos en clase, trabajar con los deberes y centrarnos en aquellas partes del temario que puedan resultar más costosas al/la estudiante en concreto.
Para aprender hay que comprender. ¡Así que no desesperes!