Pedro ofrece una enseñanza condensada de todos los aspectos que precisa el aprendizaje de la guitarra. Con un método perfectamente estructurado, hay una progresión constante aprendiendo poco a poco teoría musical, técnica, ritmo, improvisación, etc. Todo ello mediante ejercicios muy certeros para la interiorización de cada uno de los conceptos. Es perfecto para establecer una rutina clara de estudio y práctica, porque tras cada clase hay tareas que realizar y ejercicios que practicar.
La sensación de progresión, si se practica con seriedad, es muy gratificante.
Una enseñanza estructurada y metódica. Diría que es una condensación de una enseñanza musical reglada, y no queda la impresión de dejar nada fuera.
Pedro es metódico pero no rígido; permite también modificar su programa en función de gustos e intereses particulares.
En mi caso estudiamos blues y rock en un inicio, y a continuación jazz.
Además Pedro es muy hábil transmitiendo los conceptos clave para improvisar.
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