Raúl Ortiz

No creo en una sola metodología válida para cualquier alumno/a. Pienso que la enseñanza de cualquier disciplina artística necesita un método didáctico personalizado para cada uno de los aprendices. Es por ello que no utilizo una única metodología, sino que la voy adaptando según las demandas y las necesidades del alumno/a. Sin embargo, todo conocimiento parte de una serie de fundamentos generales y, por eso, procuro seguir un esquema de trabajo básico con facilidad para modificarse y adaptarse a cualquier aprendiz. El esquema que suelo usar es el siguiente:

1. Expresión corporal: cómo transmitir a través del cuerpo. Es bueno empezar conociendo nuestro cuerpo y saber qué recursos expresivos tiene.

2. Expresión oral: cómo transmitir a través de la palabra. El lenguaje es la herramienta de comunicación más potente de la cual disponemos. Conocer la conexión entre el cuerpo y la voz también será uno de los objetivos de este apartado.

3. Análisis de un texto dramático o expositivo: comprender la forma y el contenido de un texto para poder transmitir mejor su información.

4. Interpretación: aprender a transmitir emociones, sentimientos o información a través del cuerpo, la voz y el lenguaje.

Como digo, este esquema no es inquebrantable y puede verse modificado si el alumno/a prefiere o necesita centrar su objetivo en algún aspecto concreto.

Si necesitan información sobre alguna cuestión específica, no duden en contactar conmigo.

¡Os espero!