Rubén Ferrero Sánchez

Primero, comprender qué necesita el alumno, tanto en el aspecto académico como en el mental. Segundo, explicaciones de los fundamentos y teoría. Tercero, la práctica.

Todo ello con exigencia y seguimiento cercano. Trato de que el alumno identifique los fundamentos para resolver los problemas, así como de crear seguridad en el alumno a la hora de afrontar los problemas.