Tengo 4 años de experiencia dando clases a niños de todas las asignaturas, sé que cada niño es diferente, y la atención que requieren también lo es.
En función del niño, mi forma de trabajar varía, desde unos ejercicios más teóricos a otros más prácticos, dependiendo de la situación.
Normalmente, suelo hablar con el niño o niña sobre cómo se siente en clase, y sobre qué es lo que cree que puede m...
Tengo 4 años de experiencia dando clases a niños de todas las asignaturas, sé que cada niño es diferente, y la atención que requieren también lo es.
En función del niño, mi forma de trabajar varía, desde unos ejercicios más teóricos a otros más prácticos, dependiendo de la situación.
Normalmente, suelo hablar con el niño o niña sobre cómo se siente en clase, y sobre qué es lo que cree que puede mejorar, y ahí es cuando me centro más en un aspecto u otro.
Soy muy paciente, y si a la hora de enseñar tengo que repetirlo muchas veces, no pasa nada, lo hago encantado. Soy consciente de que a todos nos pueden costar más unas cosas que otras, es algo con lo que empatizo mucho.
Muchas veces los niños se frustran al ver que no avanzan en una asignatura, y lo más importante es hablar con ellos y animarles poco a poco a que la saquen adelante. En eso soy muy positivo, todos los niños con los que he trabajado han mejorado notablemente sus capacidades y notas, y siempre desde el positivismo y la empatía.
Es clave entender lo que les preocupa.
A veces les explico los ejercicios que tienen que hacer y luego los hacen ellos, y otras veces los hacemos entre los dos. Al ver mi implicación y paciencia, la mayoría de niños están más relajados a la hora de aprender, lo que facilita su mejora.
Si hay que estudiar para un exámen, a veces hacemos un esquema entre los dos, o resumen, o les explico lo que no entienden, y al final siempre acaba saliendo bien!
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