Zaira Suárez Santana

Me gusta que mis clases sean dinámicas y sobretodo muy prácticas. Los niños aprenden más en una clase dinámica y con muchas actividades que sentados memorizando palabras.

Llevo un control personalizado de cada niño para poder realizar unas actividades que vayan acorde con su nivel del idioma y su forma de aprendizaje, ya que no todos los niños pueden aprender de la misma forma ni al mismo ritmo.

Mezclo sus ambiciones y gustos con el idioma, con esto a los niños les dan muchas más ganas de aprender un idioma nuevo y mucho más rápido y además de ser mucho más divertido para ellos.

Cada día se le darán ciertas recompensas para que siga su motivación y ganas, siendo estas recompensas cosas prácticas para que puedan mezclar el aprendizaje con la diversión. También se le preguntarán cosas de la clase anterior para saber cuánta capacidad de retención tiene, de esta forma podemos saber si hay que cambiar el método de aprendizaje o hacerlo más lento/ rápido.
Siempre poniéndolos a prueba durante un periodo de tiempo para que se pueda adaptar.

Los padres también son un rol fundamental para lograr que los niños aprendan de manera adecuada. Por eso en mis clases me gusta que de vez en cuando estén presentes, que poco a poco estén más presentes pero con calma, ya que muchos niños se sienten incómodos y avergonzados de aprender idiomas con su familia cerca. Y sobretodo que los padres les hagan preguntas diarias sobre palabras/ temarios o cosas que hayan aprendido recientemente para que tengan más retención.