Adele es la profesora ideal: durante las clases, lo explica todo de forma muy sencilla y adaptada a tus necesidades. No obstante, si, una vez concluida la sesión, tienes alguna duda, la resuelve con total predisposición y gratuitamente. Y, sobre todo, con muchísima amabilidad. Además, le da igual repetir un procedimiento las veces que haga falta con tal de que lo entiendas y obtengas el resultado necesario (para mi tesis, en este caso). Todo lo qué de cuantitativa ha sido gracias a ella.