Edu Llopis Lorente

Tengo experiencia tanto como profesor como de alumno y poco a poco me he ido dando cuenta no solo de lo que le va mejor a mis alumnos sino también lo que me va mejor tanto a mi como a mis compañeros de clase.
Así pues, he ido cambiando mi forma de enseñar viendo lo que es más productivo para el alumnado (incluyéndome a mi). Y obviamente depende mucho de la materia impartida a la hora de realizar la clase, pero yo suelo hacer toda un apartado de teoría y luego todos los ejercicios relacionados con ese tema.
Bajo mi punto de vista creo que hay dos maneras de impartir una asignatura: la primera es hacer todo el tema (por ejemplo todo Tema 7) y una vez acabo ese tema hacer TODOS los ejercicios del tema; o, por contra, hacer subapartados del tema (dividiendo cada tema en 3 apartados por ejemplo) y hacer poco a poco los ejercicios de cada subapartado.
Yo opto siempre por la segunda opción de enseñanza, principalmente porque es lo que me va mejor a mí y porque es lo que he visto que da mejores resultados a mis alumnos.
Y el motivo es muy sencillo: si estás durante un tiempo prolongado haciendo ÚNICAMENTE teoría y durante otro tiempo haciendo ÚNICAMENTE ejercicios, aborreces ambas partes y no entiendes la materia.
En cambio, si divides la teoría en subapartados y vas haciendo progresivamente teoría y ejercicios, la clase se hacen mucho más dinámicas y amenas y aparte haces continuamente ejercicios relacionados con la teoría que acabas de aprender.
Como es normal, este es mi método por costumbre, pero dependiendo de cada alumno varío la manera de enseñar.