Francisco Lorenzo Lorenzo Almeida

Me gustaría señalar, primero que nada, que he tenido la posibilidad de desempeñarme como profesor de Inglés para Educación Infantil en el Colegio Nuryana, disfrutando de ver cómo los niños podían ir aprendiendo todo el vocabulario contemplado en la programación a partir de la realización de juegos y actividades dinámicas, pues, a través de ello es como entiendo que mejor pueden aprender los estudiantes.

De igual modo, querría comentar que he tenido la oportunidad de impartir las clases de la asignatura de Robótica en inglés, en el mismo colegio. De esta manera, tratándose de los primeros cursos de Educación Primaria y de la asignatura en cuestión, las actividades planteadas para que los alumnos pudiesen ir fijando los conocimientos eran todas, igualmente, de naturaleza lúdica.

Asimismo, me gustaría comentar, con respecto a mi bagaje académico, que poseo tanto el Máster Universitario en Profesorado de ESO y Bachillerato como un nivel elevado de inglés (C), certificado a través del Aptis ESOL (Bristish Council). Del mismo modo, me gustaría resaltar que me encuentro cursando a día de hoy el Grado en Español: Lengua y Literatura (en su modalidad online); pero, sobre todo, querría destacar el que soy poseedor del Título Superior de Arte Dramático. Ello, llevado a la práctica, se traduce en un acercamiento constante del plano lúdico al campo de la enseñanza, así como en la posibilidad y el ánimo de impartir los conocimientos relativos al idioma inglés desde un plano más dinámico y ameno.

En este sentido, las clases que llevaríamos a cabo se centrarían, en buena parte, en juegos y dinámicas de carácter lúdico con las que poder ir afianzando los conocimientos del idioma inglés de la manera más entretenida posible. De esta manera, la emoción habría de participar en la adquisición del conocimiento. Y, es en este sentido donde se desvela el juego como principal virtud: cuanta mayor positividad en relación con las emociones experimentadas, mayor eficacia en el aprendizaje, mayor retención del conocimiento.

Del mismo modo, se habrán de trabajar las cuatro destrezas básicas contempladas por el MCER (listening, reading, writing and speaking) a fin, no sólo de sentar las bases para el desarrollo de estas habilidades, sino, igualmente, para poder enfrentar con solvencia los exámenes oficiales tanto de Cambridge como del Bristish Council, así como la asignatura de Inglés para las etapas de Primaria y Secundaria.

En definitiva, si quieren embarcarse en una metodología de aprendizaje del inglés con la que poder, no sólo aprender, sino, sobre todo, disfrutar del proceso, no duden en apuntarse a este curso.