Fue muy interesante, divertida, adaptable. Aparte de darme consejos y prácticas, utilizabamos la aplicación Chordify, eligiendo canciones, tocando los dos las baterías, o él la batería y yo la guitarra electrica. Mi intención era aprender y pasarlo bien. Tengo 72 años. Una sensación de juventud me invadía. El trato exquisito. Nunca es tarde para empezar una actividad como la música. Y es buena para la salud, mentalmente y físicamente. Iba a clase con ilusión, también muy importante, y salía relajado y contento. Totalmente recomendable y adaptable a tus necesidades o gustos.