Detrás de esa gran simpatía que traspasa la pantalla, se esconde una brillante profesional de la enseñanza del inglés.
Debido a su condición bilingüe, sabe expresar y adaptar perfectamente los giros y vericuetos gramaticales propios de cada idioma, para que lo vayas asimilando de una manera gradual, natural y sencilla.
Nunca he llegado a aprender tantas expresiones y lo que es la gran pesadilla de los españoles, los verbos frasales, en tan poco tiempo.
Dispone de un método propio bastante eficaz y que se torna mucho más funcional cuando la que lo imparte es alguien con una, sin lugar a dudas, gran vocación por la enseñanza.
Sus clases son entretenidas, variadas, con un ritmo rápido y divertido, pero no por ello carentes de una gran utilidad, como no podría ser menos por parte de una profesora responsable y que tiene muy claro que una clase amena no está reñida con el tomarte muy en serio tu trabajo y tu gran labor didáctica.
Hoy soy yo el que examina:
Laura : Sobresalien