Miguel Hernández Toste

Desde niño tuve una curiosidad especial por cómo nos comunicamos, pero no fue hasta los quince años que un docente me descubrió la belleza de la lengua española simplemente con su pasión. El español es para mí algo que forma parte de mi forma de ser y me encanta practicar la lengua, como lector, como escritor o como profesor. Creo que el aprendizaje en el lenguaje debe darse con una base teórica y una repetición práctica, pero el refranero español es sabio "el diablo está en los detalles". La mayor tarea de un docente de lengua no es que un alumno aprenda la. lección, si no que este lo haga encantado