Patricia

Soy una chica universitaria joven.
Mis clases suelen ser muy dinámicas, con variedad de ejemplos y muy participativas.
Con niños, suelo emplear técnicas muy visuales y entretenidas para conseguir captar su atención, manteniendo un aprendizaje constante y progresivo.
Con adolescentes, en cambio, suelo centrarme en que se sientan cómodos en preguntar y en intentar que entiendan el temario tal y como ven el mundo.
De esta manera, adecuo mis clases a la edad y gustos de los alumnos, fijandome en sus puntos débiles para mejorarlos y en sus logros para reforzarlos.

Dentro de esto, mi filosofía en la educación consiste en el entendimiento. Es preferible entender un ejercicio que saber hacerlo de forma mecánica. Aún así, trato de potenciar las habilidades de cada alumno para que saquen lo mejor de ellos, ya sea su capacidad de relacionar, su capacidad de memorización...

Cada persona es única, y, por tanto, cada una requiere unas técnicas.
La magia de la enseñanza consiste en potenciar esas diferencias individuales, para que sepan emplearlas de la forma más beneficiosa posible, tanto para ser mejores alumnos como para ser mejores personas.