A menudo pensamos que las circunstancias que vivimos y que nos presenta la vida son adversas. Y pensamos que eso nos impide hacer o ser aquello que queremos o somos. Que no podemos con ello. Solo vemos problemas y amenazas. Pero eso no es así. Nadie tiene problemas más grandes que sus capacidades. Solo que esa emoción, ese miedo, inseguridad, vergüenza, tristeza, culpa, ira, angustia, etc. que se...
A menudo pensamos que las circunstancias que vivimos y que nos presenta la vida son adversas. Y pensamos que eso nos impide hacer o ser aquello que queremos o somos. Que no podemos con ello. Solo vemos problemas y amenazas. Pero eso no es así. Nadie tiene problemas más grandes que sus capacidades. Solo que esa emoción, ese miedo, inseguridad, vergüenza, tristeza, culpa, ira, angustia, etc. que sentimos, no nos deja afrontar esa situación con nuestra capacidad ilimitada y la resiliencia que innatamente tenemos.
Piensa si no sintieras esa emoción. cómo afrontarías esa situación. Cierto, solo necesitas cambiar tu manera de vivirlo, no la situación en sí.
Y ese es mi propósito, ayudarte a cambiar tu manera de vivirlo para que, dejando de sentir esa emoción, puedas manejar esa situación desde tu mejor versión. Y es posible.
Y cuando de nuevo vives esa situación sin el condicionante de la emoción que te hacía sentir, todo se vuelve más liviano, más fácil.
En mis sesiones ahondaremos en la emoción que sientes en esas situaciones que no sabes afrontar mejor, y la desprogramaremos para que no vuelva a condicionarte.
Nadie nos lo ha dicho, pero no son los problemas los que nos limitan, son las emociones que sentimos cuando se nos presentan.
Ahora que lo sabes ¿Qué vas a hacer?
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