Sandy Arteta

Podría enumerar a todos los maestros que tuve a lo largo de mi formación. También podría mencionar todos los trabajos y títulos que adquirí durante estos 12 años de continua formación. Sin embargo, realmente no llegarías a conocer a nadie, y sería solo marearte con información irrelevante. Creo que hoy en día, la palabra de mis alumnos es más importante.

Ver cómo sus cuerpos se vuelven más dinámicos, ágiles y flexibles es la prueba de que soy una buena maestra.

Mi pasión es ayudar a otras personas a sentirse mejor consigo mismas. No es solo mi pasión; creo que es mi talento natural. Se me da tan bien que tengo la suerte de vivir de ello.

Soy exigente y muy comprometida con mis alumnos.
Ahora dime tu estas comprometido o involucrado contigo mismo ?


No importa la edad que tengas, no deberías sentirte rígido al moverte. La flexibilidad es una capacidad muscular que todos tenemos desde que nacemos y que perdura durante toda nuestra vida. El cuerpo, incluida la musculatura, es como una máquina: si no lo usas, empieza a atrofiarse.

¿Te cuesta moverte? ¿Estás cansado de no poder atarte los cordones cómodamente? ¿Terminas de entrenar en el gimnasio y te duele la musculatura? ¿Eres consciente de lo poco que respiras cuando haces fuerza o estás concentrado? ¿Tu espalda está derecha o encorvada?

Todas esas respuestas a esos pequeños problemas, a los cuales nos acostumbramos pensando que son "naturales", se trabajan en la clase. La flexibilidad de un contorsionista vive dentro de ti; la única diferencia entre ellos y tú es que ellos se ocuparon de trabajarla.

Te mereces un cuerpo flexible. Todos tenemos el mismo cuerpo y las mismas posibilidades de movimiento dentro del plano físico. Repito: No importa tu edad, eres flexible por naturaleza; solo tienes a tu cuerpo olvidado.

Te espero para aprender a movernos con conciencia y tener la calidad de vida que te mereces, sin dolores y sin limitaciones.