La Educación constituye uno de los pilares fundamentales de nuestra sociedad: forma a nuestros albañiles, a nuestros médicos, a nuetros deportistas, y por encima de todo, educa a las personas, creando individuos con pensamiento crítico ante el mundo que ellos y ellas construyen junto a las generaciones del presente, y aquellas que pertenecen a nuestro legado histórico.
Como base de esos cimientos nuestro Sistema Educativo debe estar amparado bajo la confianza de Padres y Madres, quienes libremente deciden el ámbito y tipo de escuela, instituto, universidad de sus hijos, el Estado, como garante de los derechos fundamentales y de la Educación Pública, y el Sector Privado, que más allá del evidente beneficio económico con el que empresarios, trabajadores, sindicatos, etc., alcanzan sus objetivos, ofrencen alternativas culturales, que en buenas y bienitencionadas manos, constituye un amplio abanico junto a lo Público en lo que el pueblo puede confiar, sin discriminación por renta, estatus social, etnia, creencia religiosa, ideología política, u orientación sexual.
Desgraciadamente esta cuestión social ha sufrido la permisividad y la actitud pasiva por parte de una gran parte de aquellos agentes que tienen en sus manos el cambio de nuestro modelo educativo, de ahí a que se suela aludir siempre al futuro, o al pasado, trasladando una cuestión que afecta a nuestro presente, en el que la Crisis Económica es una de las mayores de Nuestra Historia, y nos enfrentamos a dificultades y cambios de todo tipo, que sin ánimo de transmitir catastrofismo, sí que nos provoca desunión y malestar, que nos aleja de una realidad más optimsta, diferente a una utopía, que podemos alcanzar.
Debido a las difultades políticas y económicas de nuestro país para atajar de raíz el tema de la edudación, este artículo busca arrojar algo de luz donde parece que solo hay oscuridad; pero nada más lejos de la realidad, si podemos presumir de un Sistema Educativo menos excluyente que otros en términos económicos y de género, así como de una sociedad en general Bien Preparada, podemos también reflexionar de aquellos defectos de la Educación Española, en todos sus ámbitos, porque siempre queda algo por hacer, lo que no es óbice para dejar de cambiar aquellas cosas que no funcionan.
Como aludía anteriormente a la falta de conciencia del presente, aquellos agentes nos hablan de los Objetivos para la Educación den 2020, lo que genera inevitablemente una pregunta: ¿Desde 2016 hasta 2020 no piensan hacer absolutamente nada?, Con el fin de dar respuestas a preguntas como si mi hijo o mi nieto podrá trabajar de lo que ha estudiado y tanto me ha costado pagarlo, de por qué los profesores se encuentran tan estresados, o de por qué existe un criterio que apuesta por la Cantidad de Títulos y no por la Calidad de los Titulados, responderé a la sociedad de 2020 con argumentos a mi modo de ver atemporales, en los que, con populismos o sin ellos, con gobierno estable o en funciones, solo es suficiente la Buena Voluntad, la Ética Personal y Profesional.
Para alcanzar los objetivos marcados en materia de Educación en el año 2020 es necesario un Pacto de Estado de Educación, al que se añada el apoyo social de profesores, padres y alumnos que transmitan la importancia y respeto hacia la profesión del Educador, así como la necesidad de la formación permanente del mismo, unos resultados eficientes en debates como la necesidad de los deberes, el aprendizaje memorístico, la importancia de investigación, la logística de los centros de formación (mayor contrato de personal docente y auxiliar, disminución horas lectivas, más concentradas en unas aulas menos saturadas), donde son claves medidas como la Proposición de Orden de formación de la Comunidad de Madrid, la Colaboración entre entidades públicas y privadas, para una educación en valores y de conocimiento por parte de las disciplinas impartidas junto a las labores concienciación por parte de asociaciones como la FAD para la lucha contra la drogadicción (sin excluir drogas legales como el alcohol o el tabaco), y la importancia de ámbitos como la psicología y otras ramas de la Salud para una conciencia preventiva de la Medicina, para un crecimiento corporal, intelectual, laboral, etc., en términos constructivos.
