Aunque el fin último de las clases particulares es que el alumno supere satisfactoriamente la materia, también es recomendable que aprenda técnicas de estudio que le permitan desenvolverse con soltura y adquirir herramientas que impulsen su autonomía para enfrentarse a los contenidos curriculares. Solo así podrá ejercitarse adecuadamente y garantizar su correcto desarrollo.
Empieza a dar clases particulares
Por eso, es necesario que los profesores insistamos en la realización de ejercicios prácticos, así como en la repetición de boletines que les ayuden a comprender la materia y, lo que es más importante, a interiorizarla para saber aplicar después el contenido aprendido a la parte más instrumental.
Considero, asimismo, que debemos eliminar las conductas memorísticas que, por sí solas, únicamente suponen un aprendizaje vacío, ya que, en general, el alumnado no comprende lo que estudia y, por tanto, no es capaz de aportar una actitud crítica ni tampoco sabe identificar lo esencial. Naturalmente, no me refiero a que debamos apostar por la desaparición de los contenidos teóricos, sino que, resulta imprescindible saber relacionarlos convenientemente con los conceptos más prácticos para demostrar su asimilación.
Desgraciadamente, la falta de práctica a la hora de elaborar resúmenes para sintetizar la información hace que pierdan mucho tiempo intentando memorizar un contenido que no ha sido debidamente comprendido. En consecuencia, resulta obvio que debemos trabajar la lectura crítica y el análisis de los textos, en tanto que muchos alumnos son incapaces de destacar la estructura y resaltar sus partes.
En efecto, se trata de aumentar la práctica y de ser conscientes de que, sin la debida dedicación, va a ser imposible conseguir los objetivos deseados.
En resumen, es imprescindible llevar los contenidos al día y dedicar tiempo a practicar los ejercicios vistos en clase. También es esencial adquirir un hábito de lectura para que cada vez resulte menos costoso enfrentarse a los textos literarios. Afortunadamente, hoy en día contamos con infinidad de recursos para que los alumnos se enfrenten a las materias con garantía de éxito, pero es importante aclarar que solo su actitud y esfuerzo van a determinar la superación de la materia. De hecho, el autoaprendizaje está considerado una de las técnicas de enseñanza más efectiva.
Considero que estas pautas son necesarias para enfrentarse a todas las materias en general, porque el secreto siempre reside en la dedicación y el esfuerzo: "Absque sudore et labore nullum opus perfectum".
Así, los alumnos deben intentar organizarse fuera del horario lectivo para aprovechar el tiempo y llevar las materias actualizadas. En ningún caso recomiendo la tan nefasta costumbre de preparar un examen o prueba el día antes porque se trata de ir reflexionando paulatinamente sobre los contenidos de la materia.
Por último, me gustaría finalizar este artículo, haciendo referencia a la encomiable labor de los docentes, no solo como transmisores de conocimiento, sino también y más importante, como portadores de unos valores morales que son esenciales para la correcta formación de los individuos y que, sin duda alguna, les van a ayudar a enfrentarse a los problemas que el futuro les depare.
