¿Alguna vez te has preguntado qué te hace sentir realmente bien?
Para tener una sensación de felicidad, se requiere una combinación óptima de tu estado mental, tu estado emocional y tu estado físico. Puedes conseguirla llevando a cabo deportes como las clases de meditación.
También, es necesario un equilibrio en las interacciones con tu familia, tus compañeras/os de trabajo, y sentirte bien dentro de tu comunidad. Y cuando todo eso funciona, tenemos la sensación de que todo está bien.
Si todo está funcionando en sincronía, tendrás un sentido de bienestar, de que tu vida realmente vale la pena.
Las personas que tienen ese sentimiento de bienestar, suelen ser muy productivas. Contribuyen mucho a su comunidad (ya sea trabajo, familia, barrio) , y obtienen mucho placer de ello.
Así que el bienestar, la felicidad, es una noción bastante compleja de lo que está sucediendo externa e internamente. El bienestar es "cómo estoy y cómo estoy funcionando dentro de la comunidad en la que vivo y trabajo", y no lo productivo que soy, económica y socialmente, o lo que tengo.
La felicidad no es un concepto difuso, sino de una idea que tenemos que entender mejor para potenciar ese estado de bienestar, de felicidad tranquila y duradera.
Salud mental positiva
La idea de psicología positiva se está haciendo viral. Y es que nos estamos dando cuenta de que la salud mental es algo más que la ausencia de enfermedades mentales. Es un estilo positivo de bienestar que incluye sentirse bien y funcionar bien. Una buena salud mental es lo que nos permite vivir la vida plenamente.
Según la Organización Mundial de la Salud, la salud mental es un estado de bienestar en el que una persona es capaz de hacer frente a las tensiones normales de la vida, trabajar de forma productiva, desarrollar su potencial y contribuir a la comunidad.
Sin embargo, aunque las enfermedades mentales pueden interferir en la calidad de vida y la capacidad de funcionar, muchos estudios han demostrado que no son simplemente extremos opuestos de un espectro. De hecho, algunas personas con síntomas activos de enfermedad mental pueden vivir una vida plena y plena y significativa, y se considera que prosperan.
Por esto, en este artículo utilizaré el término salud mental positiva. Este concepto se estudia en muchos campos diferentes, utilizando términos como bienestar, florecimiento, prosperidad y felicidad.
La salud mental positiva abarca muchos aspectos de la vida, que pueden dividirse en bienestar emocional, psicológico y social.
El bienestar emocional equivale a sentirse bien, ser feliz, experimentar emociones positivas como amor, alegría o compasión, y sentirse generalmente satisfecho con la propia vida.
La felicidad y el bienestar también se han contemplado a lo largo de los siglos desde la antigua Grecia. Aristóteles fundó la teoría clásica de la Eudaimonia, que ha venido a describir la buena vida, o la vida virtuosa. El origen del término es el concepto de búsqueda de la excelencia, o llegar a ser lo mejor de uno mismo. Esto está simbolizado por el Daimon, un ser interior que representa el mayor potencial de cada persona.
Salud mental en el yoga y el budismo
En el contexto del yoga y el budismo, sukha o "felicidad" se refiere a la sensación de felicidad, satisfacción y bienestar . Estas tradiciones orientales enseñan que la verdadera felicidad no proviene solo de buscar placer y evitar el dolor, sino de cultivar una mente equilibrada y compasiva que pueda encontrar paz y serenidad, incluso en medio de las dificultades. En lugar de perseguir constantemente experiencias agradables y huir de las desagradables, el yoga y el budismo enseñan a desarrollar una actitud de aceptación, presencia y gratitud hacia todas las experiencias, lo que conduce a una sensación más profunda y duradera de felicidad y bienestar.
En recientes estudios de psicología moderna, se están integrando también todas estas tradiciones. La construcción de emociones positivas, en este caso, se trabaja a través de meditaciones muy populares como la meditación en la gratitud y en la bondad. Los estudios reflejan que meditar este tipo de sentimientos en la vida diaria aumenta en el funcionamiento positivo y resiliencia.
Las emociones positivas se están estudiando ampliamente en el campo de la psicología positiva. Barbara Fredrickson es una de las más destacadas investigadoras de las emociones positivas y ha desarrollado una interesante teoría de "ampliar y construir" que he descubierto recientemente.
Esta teoría afirma que las emociones positivas tienden a ampliar el repertorio de pensamientos y acciones de la persona y conducen al juego y la exploración. Esto conduce al desarrollo de recursos, tales como, conexiones sociales, conocimiento del entorno y estrategias de afrontamiento, todos ellos esenciales para el bienestar y la resiliencia.
La felicidad sí existe. Y no depende del dinero, del estatus, del último móvil ni de los resultados del último partido.
Quizás sea necesario volver a replantearse qué es la felicidad y creer en ella, firmemente.
