La epidemia que ya está aquí: Obesidad
En 2016 más de 1900 millones de adultos entre 18-65 años tenían sobrepeso, de ellos, más de 650 millones eran obesos, todo esto sin contabilizar los 350 millones de casos de obesidad infantil en todo el mundo, según la OMS. Estas cifras continúan multiplicándose en la actualidad.
¿Qué es la obesidad? ¿Cuáles son sus causas? ¿Qué implicaciones tiene?
- El sobrepeso y la obesidad se caracterizan por una acumulación excesiva de grasa corporal que conlleva problemas de salud.
- Las causas fundamentales son dos: 1) Desequilibrio energético debido al mayor consumo de alimentos grasos y azucarados. 2) Sedentarismo de la población.
- Aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, diabetes, algunos cánceres, presión arterial alta, dificultades respiratorias, trastornos del aparato locomotor, hiperlipidemia y depresión.
¿A qué tratamiento habitual se someten personas con alto grado de obesidad?
- Tratamientos con cirugía: Bypass gástrico, Gastrectomía y banda gástrica ajustable.
- Tratamiento sin cirugía: Big flash o big (balón) y método POSE (pliegues).
- Tratamientos farmacológicos.
¿Qué tratamiento deberíamos plantearnos?
Siempre debemos luchar hacia la prevención, implantando una dieta equilibrada y una practica regular de actividad física… pero ¿Qué hacemos una vez tenemos el problema? Un tratamiento integral que podría incluir alguno de los tratamientos ya mencionados, sumados siempre, con un acompañamiento de ejercicio físico.
¿Qué actividad física es eficaz para este tipo de población?
La revisión sistemática, investiga los efectos del entrenamiento físico en pacientes con obesidad, en programas de tratamiento clínicos y quirúrgicos:
- Recomiendan por su mayor efectividad los ejercicios aeróbicos: (*con la limitación de que han sido los más estudiados) ya que disminuyen en mayor porcentaje la masa grasa tanto en períodos cortos como largos de intervención.
- También recomiendan ejercicios de entrenamiento de fuerza por sus beneficios en el aumento de la fuerza, la resistencia muscular, la autonomía funcional y el incremento en el metabolismo basal.
- IMPORTANTE: La mayoría de este tipo de población son reacios a la práctica deportiva, eso marca la importancia de desarrollar prescripciones de ejercicio “individuales” que sean progresivas, generen adherencia y motivación.
Conclusiones
“Mejor prevenir que curar”-Panckoucke (1749)
Tomar “dosis” regulares de actividad física para prevenir enfermedades y comorbilidades como la expuesta, y sobretodo tener mayor calidad de vida y ser más felices.
