Pese a que las clases particulares han estado presentes desde hace mucho tiempo, su importancia se ha visto incrementada a consencuencia de la pandemia del coronavirus. Ante la gran dificultad de asistir a las clases, y en muchos casos los pocos medios que se tienen en algunos centros, hace plantearse una reestructuración del modelo educativo actual de cara al futuro más inmediato.
El conocimiento es uno de los pilares que hacen de la humanidad lo que es, nos contruye como personas, nos enseña valores y nos ayuda a ser quienes somos a lo largo de nuestra vida. Los últimos meses han supuesto un problema en el desarrollo de este, con una desaceleración no conocida hasta la fecha. Los alumnos que no disponían de medios se han visto relegados a una situación en la que carecían de esa fuente de conocimiento y se han visto muy mermados.
Por suerte, y tras el verano ha habido tiempo para prepararse y ahora es el momento de recuperar el tiempo perdido y volver más fuertes que nunca. Los alumnos, los profesores de colegios, intitutos, grados, particulares, etc, debemos estar preparados para dar lo mejor de nosotros mismos e intentar solventar esta situación.
Para ello, creo y estoy convencido con los profesores particulares van a jugar un papel muy importante en esta ocasión, dada la situación de cierres de colegio, falta de horas lectivas, etc. Las redes ofrecen un sinfin de posibilidades para el aprendizaje, en ese sentido, el espacio virtual se convierte el la principal arma de batalla del alumno, que junto con la ayuda de toda la gente mecionada antes, lo preprara para el gran reto que nos estamos enfrentando.