Cuando hablamos sobre el concepto de apoyo escolar, este engloba no solo la ayuda para aprobar una asignatura en concreto, sino que se aborda también una metodología integral que complementa la educación y las clases que se reciben, con el fin no solo de solventar las dificultades que puedan mostrar en un área concreta, sino también para potenciar su método de estudio y que puedan luego afrontar cualquier aprendizaje con garantías de éxito.
El apoyo escolar es algo más que llenar un espacio formativo de los centros escolares, quien busca la excelencia particular para afrontar el estudio.
Aunque existen muchas corrientes educativas contrarias de que los más pequeños cuenten con clases de apoyo escolar fuera del horario del centro, diversos puntos de vista apuntan a que aquellos niños que consiguen naturalizar un método de estudio adaptado a sus potencialidades sufren menos abandono escolar y llegan más lejos.
Las clases de apoyo, en definitiva, superan el concepto de refuerzo para aprobar.
Las clases de apoyo aportan una serie de beneficios:
- Aprender técnicas de estudio de acuerdo a tu nivel educativo que te ayudaran en tu vida académica.
- Se refuerzan los conocimientos dados en clase pero con una atención individualizada.
- Se van a crear hábitos de estudios que te ayudaran a mejorar tu ritmo diario.
- Se les enseña a afrontar el estrés escolar: afrontar el miedo a los exámenes, etc.
- Hay una constante motivación a la hora de aprender, esto por ese contacto personal y a trabajar en grupos reducidos, así encuentran el apoyo académico.
- Se utilizan las nuevas tecnologías a fin de ayudar a los alumnos e incentivarles a estudiar con agrado.
