Cuando estudiamos cualquier lengua, llegamos a un punto en que nos encontramos con distintos tipos de palabras: sustantivos, adjetivos y verbos son los más conocidos. Sin embargo, hay otros tipos, como los adverbios, que puede ser difícil diferenciar si no los estudiamos bien. Pero ¡los adverbios son palabras mucho más comunes de lo que creemos!
¿Qué los diferencia?
La razón por la que se diferencia entre tipos de palabras es porque cumplen distintas funciones en la oración y en el lenguaje. Por ejemplo, los sustantivos son los que nombran objetos, personas o lugares (mesa, ordenador, gato, madre, profesor, casa, aula, calle); los verbos indican acciones que realizan las personas o los objetos (comer, dormir, jugar, leer, bailar). Hasta ahí no es tan difícil, ¿verdad?
Palabras que modifican a otras
Los adjetivos y los adverbios son palabras cuya función es modificar o especificar el significado que otras palabras tienen. Veamos esto.
Los adjetivos modifican a los sustantivos, por ejemplo:
- La mesa está limpia (mesa es sustantivo y limpia es adjetivo)
En este caso, el adjetivo limpia modifica el significado de mesa: no es una mesa sucia.
Los adverbios modifican a los verbos, adjetivos y otros adverbios, por ejemplo:
- Comí el desayuno rápidamente (comí es el verbo, rápidamente el adverbio)
En este caso, la palabra rápidamente determina de qué manera comí el desayuno: ¿lentamente? Pues no, lo hice rápidamente.
- El atardecer es muy bello
Aquí, el adverbio muy modifica al adjetivo bello
- Ese coche avanza demasiado despacio
En esta frase, el adverbio demasiado modifica al adverbio despacio.
Repasando
La diferencia entre los adjetivos y los adverbios es que los primeros modifican a los sustantivos, mientras que los segundos modifican a los verbos, adjetivos y otros adverbios.
En la frase de arriba, el adjetivo responde a la pregunta ¿cómo es/está (el sustantivo)?: ¿cómo está la mesa? -> la mesa está limpia
En la primera frase de adverbios, este responde a la pregunta: ¿cómo se desarrolló la acción?: ¿cómo comí el desayuno? -> lo comí rápidamente
¡Esto no se acaba aquí!
Además de responder a cómo se hacen las acciones, los adverbios pueden responder a las preguntas dónde, cuándo, cuánto, afirmar, negar o dudar. Así, tenemos siete tipos de adverbios, que definen: lugar, tiempo, modo, cantidad, afirmación, negación y duda.
Por ejemplo:
- Ella vive cerca de aquí
- Además de bailar, le gusta cantar y actuar
- Después de clase nos vemos
- Jamás volveré a mencionarlo
- Quizás pida otro helado
- ¡Yo tengo menos caramelos que él!
En estas siete frases subrayé los adverbios. ¿Te animas a descubrir a qué tipo pertenecen?
> Un truco para encontrar adverbios: todas las palabras que terminan en "...mente", son adverbios formados a partir de adjetivos, y nos dicen cómo hacemos las acciones. Por ejemplo: rápida+mente, lenta+mente, disimulada+mente, obvia+mente, ruidosa+mente, etc.
Conclusión
Los adverbios están en nuestro lenguaje constante...mente! Solo que a veces pasan desapercibidos. Ahora que sabemos que son los que modifican a otras palabras como verbos, adjetivos y otros adverbios, podemos estar más atentas/os al leer y tratar de identificarlos. Por ejemplo, en este párrafo hay cuatro adverbios... ¿cuáles son?
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