El juego como forma de aprendizaje es una herramienta que tiene muchas variantes. Me gustaría destacar la variante del descubrimiento por error.
El descubrimiento por error es básico en la historia de la humanidad. La mente multidisciplinar y la función de mente divergente hace que unas técnicas de improvisación y sus juegos puedan crear formas nuevas o seminuevas que atrapen la atención del pensador investigador.
Creamos desde la inconsciencia una herramientas que se pueden fijar de manera consciente.
Esto se puede llevar a cabo a través del juego de herramientas y formas pensantes que se hacen mecánicamente. La mente se activa cuando algo interesante ha ocurrido. Y esto ocurre por un encuentro no planificado de algo.
El placer de haberlo hecho de esta forma y sin una planificación y ordenación feroz de las ideas hace que haberlo hecho incluso por error sea gratificante y personal. El error se buscaba.
¿Pero sólo por error se puede encontrar fórmulas pensantes nuevas? No, no sólo por error. Pero el error es una equivocación en las formas que estás utilizando, es una forma más que puede ser interesante si así lo crees. Es una nota que no estaba dentro de la escala que puedes incorporar. O un trazado mental que se puede incorporar que no estaba dentro de tus estructuras.
El error es un maestro que te da pautas, y escoges el que encuentres interesante. Lo maravilloso de este asunto, es que tu eres tu propio maestro a través del error. Después si quieres puedes consultar a otros maestros.
