Para poder destacarnos con el uso del inglés, hay que vivirlo. Como profesora de inglés, veo como todos los alumnos pasan por procesos y tiempos de aprendizaje muy diferentes, porque sus estilos de vida varían significativamente, y por ende sus prioridades y responsabilidades cambian.
Existen múltiples las razones para justificar esos tiempos y procesos, y el primero es la edad en la que se comienza a aprender un idioma, ya que puede afectar el ritmo y la facilidad con la que se aprende. Por ejemplo, los niños pequeños pueden aprender un nuevo idioma más rápidamente que los adultos y esto es una psicología comprobada.
Por otro lado, la motivación es un factor importante en el aprendizaje de un nuevo idioma. Las personas que tienen una motivación intrínseca, así como un interés personal o la necesidad de comunicarse con hablantes nativos, pueden aprender más rápidamente y de manera más efectiva que aquellos que no tienen una motivación clara. Además, muchas circunstancias externas pueden afectar de múltiples maneras al alumno, tanto de manera positiva o negativa.
También es importante considerar las habilidades lingüísticas como la capacidad de leer y escribir en su lengua materna, ya que puede tener una ventaja en el aprendizaje de un nuevo idioma. Esto es fundamental al momento de integrar una segunda herramienta de comunicación, porque al pasar por el proceso de "traducción simultánea", la información puede llegar o no a tergiversarse.
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Por supuesto que también influye drásticamente el método de enseñanza utilizado, ya puede afectar el ritmo y la eficacia del aprendizaje. Algunas personas aprenden mejor a través de la práctica y la repetición, mientras que otras pueden aprender mejor a través de la inmersión en el idioma. Es igual que asistir a clases particulares de manera individual vs las grupales.
Al igual que la influencia del método utilizado, la exposición ante el idioma es crucial, ya que la cantidad en que se haga también puede influir en el ritmo y la facilidad del aprendizaje. Aquellas personas que tienen más oportunidades de practicar el idioma, ya sea a través de interacciones cotidianas o a través de programas de inmersión, pueden aprender más rápidamente que aquellos que tienen menos exposición al idioma.
Entonces, quédate con esto: El proceso de aprendizaje del inglés es diferente para cada alumno debido a una combinación de factores individuales, incluyendo edad, motivación, habilidades lingüísticas previas, método de enseñanza y exposición al idioma, por eso es importante tener en cuenta que el aprendizaje de un idioma es un proceso continuo y que cada persona progresa a su propio ritmo.