La pedagogia es muy diferente si debemos impartir clases a alumnos adultos o si las clases van dirigidas a niños y adolescentes. Las personas adultas, por el contrario que los niños, cuando deciden ponerse a estudiar es porque quieren hacerlo y el "querer" es un concepto altamente importante para el trabajo de las clases particulares de inglés para adultos.
Empieza a dar clases particulares
Por la experiencia que poseo después de dar numerosas clases a adultos, puedo garantizar que cuando una persona adulta se propone recibir clases de inglés en el 90% de las ocasiones es por motivos laborales, o bien lo necesitan para sus puestos de trabajos actuales o bien es porque quieren mejorar su situación laboral.
En el primer caso, el aprendizaje de la lengua inglesa toma el camino del conocimiento para poder desempeñar un trabajo en concreto y suele darse el caso de que dichas personas tengan ya un nivel mínimo del inglés y de este modo profundizamos en aquello que necesita en su día a día laboral. Las clases suelen ser productivas y el alumno aprende rápidamente puesto que pone en práctica en su trabajo aquello que va aprendiendo durante las clases.
En el segundo caso, cuando se trata de una mejora en su puesto de trabajo sucede que en muchas ocasiones pretenden superar un examen en concreto (prueba de acceso a la universidad, selectivo, acceso a grado medio o superior, o acceder a un puesto de funcionariado público.
En todos los casos el objetivo no es aprender el idioma sino más bien superar un examen de inglés en contreto. De esta manera las clases van orientadas a la superación de dicho examen y toman un rumbo diferente. Estas clases suelen ser más opresivas para el alumno ya que disponemos de un tiempo limitado (hasta fecha de examen) pero al final todo se supera con éxito aunque con más esfuerzo.
Por tanto, la manera de como dar clases de inglés a adultos depende únicamente de las necesidades inmediatas del alumno y el profesor debe saber adaptarse al mismo y empatizar con su situación personal.
