Planifica las clases de inglés con anticipación y crea planes de lecciones detallados.

Establece un espacio cómodo y profesional en tu hogar que puedas usar para dar clases de inglés online. Esto podría incluir instalar un escritorio o una mesa con un portátil, y asegurarse de que haya una buena conexión a Internet.
Elije una plataforma de enseñanza de inglés online de buena reputación para usar en sus clases.
Asegúrate de estar familiarizado con la plataforma de clases que utilizarás y pruébala antes de tu primera clase de inglés como profesor particular online. Esto te ayudará a evitar cualesquiera problemas técnicos durante la clase.

Planifica las clases de inglés con anticipación y crea planes de lecciones detallados. Esto ayudará a enseñar con eficacia y mantener las clases particulares interesantes.
Se flexible con los métodos de enseñanza y está dispuesto a probar cosas nuevas. Esto ayudará a mantener las clases atractivas y los estudiantes apreciarán esos esfuerzos.
Se paciente con los alumnos y recuerda que todos aprendemos a un ritmo diferente. Es importante ser alentador y positivo al enseñar inglés online.

Asegúrate de estar bien preparado para cada clase particular. Esto incluye estar familiarizado con el material que enseñarás y tener cualquier material extra siempre a mano.
Usa una variedad de recursos para mantener las clases particulares interesantes. Anima a los estudiantes a interactuar entre ellos tanto como sea posible. Presta mucha atención a las necesidades individuales de cada estudiante.
Deberás estar preparado para cualquier imprevisto, ya sea técnico o el hecho de que el alumno no pudo estudiar y debes cambiar la clase del día.

Se flexible: las clases particulares de inglés en línea se pueden dar a cualquier hora del día o de la noche, así que se flexible en el horario. Muchos estudiantes están ocupados y es posible que no puedan comprometerse con un horario regular.
Puedes ofrecer diferentes tipos de clases particulares, como clases de conversación, clases de gramática o clases enfocadas en temas específicos.

Prepárate: como con cualquier tipo de enseñanza, es importante estar preparado para tus clases particulares de inglés online. Asegúrese de tener un plan de lección bien organizado y de conocer bien el material.
Se paciente: recuerda que los alumnos están aprendiendo un nuevo idioma, la tarea más difícil para el cerebro humano de acuerdo a la neurociencia; por lo que es posible que no entiendan todo lo que dices al principio. Se paciente y explica las cosas con claridad y de varias maneras diferentes.

Se solidario: es importante ser solidario y alentador cuando se enseña inglés. Felicita a tus alumnos cuando lo hagan bien y ayúdales a superar cualquier error.
Asegúrate de tener una buena conexión a Internet. No querrás que tus clases se vean interrumpidas por una mala conexión. Usa auriculares o micrófono para que los alumnos puedan escucharte con claridad.
Ten un plan de lección preparado antes de cada clase particular. Esto ayudará a mantenerte al día y garantizar que cada clase sea productiva. Utiliza recursos en línea como pizarras o presentaciones de PowerPoint para ayudar a involucrar a los estudiantes.

Ofrece una variedad de tipos de clases para atraer diferentes estilos de aprendizaje. Algunos estudiantes pueden preferir escuchar lecciones de audio, mientras que otros pueden preferir juegos interactivos.
Proporciona a los alumnos comentarios regulares para que puedan realizar un seguimiento de su progreso. Anima a los alumnos a hacer preguntas y participar en clase.
Se paciente y no te desanimes si los alumnos no parecen progresar tan rápido como te gustaría. Todos aprenden a un ritmo diferente.
Asegúrate de estar familiarizado con el material que enseñará. Esto incluye tanto el contenido de las lecciones como la tecnología que utilizará.
Asegúrate de que los alumnos se sientan cómodos con la tecnología que utilizarás. Te sorprenderá saber que hay muchas personas que aún no saben usar el ordenador, o que ni siquiera tienen uno en casa. Nunca des nada por hecho. Asegúrate de sentirte cómodo con los estudiantes a los que enseñarás.

Asegúrate de que las lecciones sean atractivas e interactivas. Esto incluye tanto el contenido de las lecciones como la presentación de las mismas. Es mejor dedicar horas a la edición del material, que presentar un material soso, sin resaltadores ni variedad de letras.
Asegúrate de estar disponible para responder cualquier pregunta que puedan tener los estudiantes. Esto incluye tanto el contenido de las lecciones como la tecnología que utilizarás.
Y por último y más importante que todo: ¡Diviértete y disfruta enseñando a tus alumnos!