La pandemia ha cambiado radicalmente el panorama educativo, creando espacios donde poder dar clases online y desarrollar una actividad docente con costes bajos y mayor audiencia. Sin embargo, la creciente competición por ocupar una parte de ese mercado nos obliga a optimizar nuestras estrategias docentes y de marketing.
Estas son algunas ideas que facilitan tanto la labor educativa como la de encontrar alumnos online.
1.- Personaliza tus clases
Uno de las mayores quejas de los alumnos de inglés es el sistema de "fichas", normalmente el que se usa en los colegios. Los padres no quieren más fichas. Desarrollar un método propio lleva tiempo y paciencia. Cada maestrillo tiene su librillo. Encuentra el tuyo. Diferénciate.
Céntrate en aquellas áreas donde el alumno flaquee. En muchos casos, el alumno necesitará unas bases sólidas gramaticales que seguramente ya haya olvidado. En otros se tratará de alumnos con necesidad de mejorar el Speaking para una entrevista de trabajo en inglés. Personaliza y escucha a tu alumno. Él te dirá qué es lo que quiere.
Comienza probando aquellos métodos que resultaron contigo. Al fin y alcabo, eres profesor de inglés por algo. Haz memoria y recuerda qué recursos usaba ese profesor con el que realmente empezaste a dominar el idioma.
2.- Consejos para encontrar alumnos y ganar visibilidad
No menos importante que el método a usar, es tener alguien con quién usarlo. El posicionamiento no solo es importante, es una cuestión de supervivencia profesional. Si no existes online, sencillamente no existes.
Recurre a tus antiguos alumnos para conseguir recomendaciones. No hay nada que venda mejor que la certeza de que más gente te conoce y ha triunfado gracias a tus servicios. Responde inmediatamente a los posibles alumnos que contacten contigo. La rapidez en tu respuesta puede suponer la diferencia entre ganar o perder un cliente.
3.- Utiliza un buen equipo
No es lo mismo dar clases desde un laptop, que en una tablet o que en un ordenador de mesa. No necesitas hacer un gran gasto para montar tu estación de trabajo online, pero algunas cosas no pueden faltar.
Un ordenador personal potente es imprescindible. Tendrás que tener varios programas y webs abiertos simultáneamente y la potencia del procesador es fundamental. Personalmente, yo no recomiendo ni tablets, ni móviles, ni siquiera laptops. Un PC de mesa normal te saldrá más barato y dará muchos menos problemas.
La buena iluminación, tener libros o una planta en el fondo de la imágen, unos cascos con los que puedas aguantar ocho horas de clase diarias y una buena silla de oficina o gaming te ayudarán enormemente.
En conclusión, dar clases online hace que saquemos de nosotros tanto al docente como al vendedor que llevamos dentro. Es una tarea que no acaba nunca, que te exige saber sobre áreas para las que seguramente nunca estudiaste, pero que son imprescindibles hoy en día.
