No cabe duda que la vida te da sorpresas, y este año que termina 2020, sin duda nos ha dado una sorpresa, y nada agradable, que ha desestabilizado todas las facetas de nuestras vidas a todos los niveles y a todas las edades. La pandemia que venimos sufriendo desde inicios del presente año, nos ha obligado a cambiar muchos de nuestros hábitos y ha modificado nuestra vida diaria, nuestro trabajo, la relación con los demas y de manera significativa, la enseñanza.
Los estudiantes acostumbrados al trato cercano del profesor de aula, se han visto desplazados por la imagen a veces borrosa de una persona detrás de la pantalla de un frío ordenador. Todo lo que transmite el docente presencialmente a los alumnos se desvanece de un plumazo y presenta la problemática de cómo hacer frente a esta época de estudio tan difícil para todos los que estais estudiando.
Como profesora particular y consciente de la situación que nos rodea, he tenido que adaptar mi labor docente a la nueva situación, y en la mayor parte de los casos, por no decir todos, las clases presenciales se han visto sustituidas por las clases online.
Las claseson line se presentan como una alternativa perfecta a las de impartir clase a domicilio, aunque exige más esfuerzo por mi parte transmitir a través de un ordenador la enseñanza y el conocimiento que deseo que llegue a todos mis alumnos. Es cierto que hay gran número de herramientas que ayudan mucho en las clases online, como programas en donde se puede compartir escritorio con el alumno para que pueda visualizar las materias que se están impartiendo.
Asimismo también es interesante que el entorno virtual donde el profesor está impartiendo las clases tenga un aspecto ordenado y profesional. Existen una gran cantidad de plataformmas virtuales muy cómodas y comprensibles para todos, tanto docentes como alumnos. Muchos de estos formatos incluyen la opcion de compartir el escritorio con el alumno, adjuntar archivos, esquemas en formatos variados, imagenes y videos, lo cual hace que la sesion sea dinámica y atractiva para el alumno.
En este momento hay que ser conscientes de la situación y aunque el trato presencial es muy importante y efectivo, sin embargo la proyección que están teniendo los avances informaticos en la esfera laboral es toda una revolución.
Considero que, aunque supone mayor esfuerzo por mi parte, lo importante es transmitir la esencia y el conocimiento a los jóvenes estudiantes y todo ello se puede lograr cuando realmente disfrutas con la enseñanza y se tiene vocación.
La pasión por el estudio, y la transmisión del conocimiento a las nuevas generaciones de estudiantes no esta reñido con la presencialidad o no de la docencia. Un profesor con alma y vocacion de enseñar consigue formar y transmitir conocimiento ya sea detrás de la fría pantalla del ordenador o en un aula.
Quizás estemos ante un nuevo modelo de enseñanza para la cual hemos de estar los docentes de centros educativos, universidades y profesores de apoyo a la altura y saber transmitir nuestro conocimiento utilizando los medios informaticos que tenemos a nuestra disposición como herramienta y vehículo de conocimiento.
