Educar en igualdad es enseñar a niñas y niños desde la igualdad de valores,oportunidades y trato a las personas, sin estereotipos sexitas, androcéntricos, ni actitudes discriminatorias. Implica que las actitudes y valores tradicionalmente considerados como masculinos y femeninos pueden ser aceptados y asumidos por personas de cualquier sexo.
También, enseñar, tanto a los hijos como a las hijas, las actividades domésticas necesarias para la autonomía personal o que las elecciones formativas y profesionales no se hagan a partir de sesgos de genero.
Este tipo de educación prepara para tomar conciencia sobre los roles sexitas y desarrolla potencionalidades en ambos sexos.
Conlleva que a los hijos e hijas se les proporcione un determinado entorno para aprender en igualdad. Así, durante la infancia tenemos que ofrecerles que utilicen que utilicen todo tipo de juguetes, invitandoles a que investiguen nuevos papeles y nuevas situaciones, ayudándoles a que expresen distintos sentimientos (llorar, reir, ser dulces o rebelarse), o a través de la lectura de cuentos no sexistas en lugar de aquellos tradicionales repletos de estereotipos.
En el sistema educativo es necesario conseguir la igualdad real de todos los modelos de las familias. Una iniciativa, puede ser el potenciar la celebración del Día internacional de las familias como forma de evitar las discriminaciones y exclusiones hacia niños y niñas por la orientación sexual o la identidad de género de sus padres.
En sintesis el sistema educativo ha de velar para que los centros docentes sean un espacio respetuoso, libre de toda presión, agresión o discriminación por motivos de identidad de género , expresión de género y diversidad de orientaciónes sexuales
