Como profesor particular, voy a mostraros una propuesta para definir los objetivos de tu trabajo de investigación paso a paso y a partir de ejemplos prácticos. Si no has visto la parte 1 ni tampoco la entrada sobre cómo elegir un tema de investigación, te invito a que lo hagas para asegurarte de tener una buena base antes de continuar.
Primer paso. La sinopsis del trabajo.
Para asegurarnos de tener el tema bien identificado y definido, haremos el ejercicio de explicarlo a partir de una sinopsis como si se tratara del resumen de una película. Imagina que, de forma fácil, tienes que contarle a alguien que no sabe nada del tema, de qué va tu propuesta. Si eres incapaz de resumir en pocas palabras (máximo 3 líneas) tu propuesta, será un indicio de que aún tienes que darle algunas vueltas y es precipitado avanzar. Para la sinopsis, utilizaremos la fórmula "Mi trabajo va de...":
Vamos a partir de un ejemplo real. Hace un par de años un estudiante me propuso hacer un trabajo sobre la elaboración de chocolate de forma artesanal. Además, cómo no tenía acceso a utensilios profesionales, acabamos valorando la opción de que realizará el experimento en casa, para ver si era viable reproducir los procesos químicos necesarios a escala doméstica. El resultado de sinopsis fue el siguiente:
- "Mi trabajo va de como elaborar chocolate en casa a partir de productos de proximidad y ecológicos".
Si te fijas esta sinopsis resulta un buen punto de partida. Es una síntesis de la propuesta, lo justo para entender la premisa principal de forma general, pero sin excederse en detalles concretos que nos distraigan o confundan. Es algo así como la esencia del trabajo.
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Paso dos. Identificar los diferentes "momentos" del trabajo.
Cuando nos referimos a que los objetivos articulan un trabajo y lo pautan, en realidad lo que estamos diciendo es que cada objetivo se referirá a un momento específico del trabajo. Así que antes de entrar a distinguir entre objetivos generales y específicos o revisar la estructura de cada objetivo, vamos a realizar una lluvia de ideas para identificar algunos de los momentos que tendrá el trabajo. Utilizaremos la fórmula "Quiero hacer/Quiero saber" y a partir de leer la sinopsis iremos escribiendo todo lo que se nos ocurra en relación al trabajo. Del ejemplo anterior, surgieron las siguientes propuestas:
- Quiero saber si es económicamente viable producir chocolate casero y cuanta es la diferencia respecto a un producto industrial
- Quiero saber como funciona el proceso de elaboración del chocolate, las diferentes fases que lo componen y si existen diferencias entre las variedades (con leche, puro, blanca).
- Quiero hacer chocolate con herramientas de una cocina de casa
- Quiero saber si es viable hacer chocolate con herramientas de una cocina de casa
- Quiero saber cuáles son los requisitos que debe cumplir un producto par poderlo llamar ecológico
Estos son algunos de los ejemplos, la lista era más larga. Como puedes ver, a raíz de la sinopsis vamos extrayendo elementos que nos interesa conocer o que necesitamos para poder proceder en nuestro trabajo. Se trata de un ejercicio intuitivo, aquí no hay que obsesionarse con la forma, el orden o la escritura. Pretendemos conseguir cuantas más propuestas mejor, aunque luego haya que descartar algunas.
Paso tres. Dotar de estructura a los objetivos.
El siguiente paso es convertir estas propuestas en enunciados que formalmente se parezcan más a un objetivo. Si recuerdas la anterior lección, la estructura de un objetivo tiene 3 requisitos básicos:
- El objetivo tiene que estar encabezado por un verbo en infinitivo
- La formulación es en positivo
- Cada objetivo tan solo puede expresar una acción
Lo que vamos a hacer ahora es transformar cada propuesta en un objetivo dotado de estructura a partir de los requisitos que te acabo de dar. Si partimos de la primera propuesta "Quiero saber si es económicamente viable producir chocolate casero y cuanta es la diferencia respecto a un producto industrial", lo primero que vemos es que se describen varias acciones un una misma frase. Así que hay que separarlas. Quedaría algo así:
- Quiero saber si es económicamente viable producir chocolate casero
- Quiero saber cuanta es la diferencia del chocolate casero respecto a un producto industrial
Hemos separado las acciones y ahora tenemos dos propuestas que expresan tan solo una acción. Además, el hecho de encabezarlas con "quiero hacer/quiero saber" nos garantiza que las propuestas están formuladas en positivo. Te pongo un ejemplo para que veas como funciona la formulación en positivo o en negativo:
- Formulación negativa: quiero evitar que sea inviable producir chocolate casero
- Formulación positiva: quiero buscar fórmulas para producir chocolate casero de forma viable
Si vamos reproduciendo el proceso paso a paso con cada frase acabaremos con una lista de propuestas que están formuladas en positivo y que expresan tan solo una acción. El siguiente paso es buscar un verbo en infinitivo que pueda substituir el "quiero saber/quiero hacer". Al final del artículo anterior tienes una lista de verbos que te pueden servir. Si seguimos con el ejemplo anterior, tendríamos lo siguiente:
- "Quiero saber si es económicamente viable producir chocolate casero" pasa a "Identificar la viabilidad de producir chocolate casero"
- "Quiero saber cuanta es la diferencia del chocolate casero respecto a un producto industrial" pasa a "Diferenciar los costes de producción de un producto casero respecto a un producto industrial"
Como ves, además de añadir un verbo al inicio, también hay que hacer algunas pequeñas correcciones y ajustes para que el objetivo acabe de tener una formulación óptima. Podemos cambiar ligeramente la estructura y modificar los conceptos coloquiales por otros más técnicos. Vamos a añadir el resto de ejemplos para que la lista quede completa, el resultado sería el siguiente:
- Identificar la viabilidad de producir chocolate casero
- Diferenciar los costes de producción de un producto casero respecto a un producto industrial
- Profundizar en el proceso de elaboración del chocolate y sus diferentes fases.
- Identificar las diferencias en el proceso de elaboración del chocolate blanco, con leche y puro
- Elaborar chocolate en casa con herramientas e instrumentos domésticos
- Identificar las limitaciones de la elaboración de chocolate a escala doméstica
- Analizar los requisitos necesarios para denominar 'ecológico' a un producto
Paso cuatro. Ordenar, agrupar y jerarquizar.
Llega el momento de ordenar los diferentes objetivos que hemos formulado y clasificarlos según sean objetivos generales o específicos. Si tienes dudas en este punto, te recomiendo que acudas al artículo anterior donde explico las diferentes clasificaciones de objetivos. El resultado sería el siguiente:
- Profundizar en el proceso de elaboración del chocolate y sus diferentes fases.
- Identificar las diferencias en el proceso de elaboración del chocolate blanco, con leche y puro
- Diferenciar los costes de producción de un producto casero respecto a un producto industrial
- Elaborar chocolate en casa con herramientas e instrumentos domésticos
- Identificar la viabilidad de producir chocolate casero
- Identificar las limitaciones de la elaboración de chocolate a escala doméstica
- Analizar los requisitos necesarios para denominar 'ecológico' a un producto
Esta clasificación es provisional y acepta modificaciones, pero ya puedes ver que la propuesta va adquiriendo estructura. Lo que hemos hecho es dividir los objetivos entre generales y específicos y luego identificar cuáles iban dentro de otros. El último paso ha sido ordenar los objetivos generales de forma que la propuesta avance gradualmente. Para hacer chocolate, antes tengo que saber hacer chocolate, así que hemos elegido como objetivo general uno "Profundizar en el proceso de elaboración...".
Cómo digo, se trata de un borrador y es provisional, pero ya es un punto de partida interesante para poder seguir trabajando o discutir la propuesta con nuestro tutor/a. Sobre este ejemplo, viendo la propuesta sobre el papel, nos dimos cuenta con mi estudiante de que el objetivo general 3 quedaba fuera de contexto y que, o bien lo eliminábamos o lo reformulábamos y le añadíamos objetivos específicos que lo complementaran.
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Paso cinco. Validar los objetivos con la técnica SMART
Una vez tenemos los objetivos redactados, cómo podemos saber si la formulación es correcta. Hay una respuesta rápida: siempre que al leer un objetivo te hagas una idea clara de lo que pretende conseguir, estaremos cerca de esa formulación correcta! Ahora bien, con esto no es suficiente, así que toca aplicar la técnica SMART que ya comentamos en el articulo anterior (corre a buscarlo si aún no lo has leído). A modo de resumen, SMART son las siglas en ingles que definen los criterios para validar los objetivos de investigación. Estos tienen que ser especificos, medibles, alcanzables, relevantes y temporalizados. Vamos a partir del siguiente ejemplo para analizarlo y ver que podriamos mejorar:
- Identificar las diferencias en el proceso de elaboración del chocolate blanco, con leche y puro.
Si lo analizamos utilizando la técnica SMART, encontramos lo siguiente:
- Específico: El objetivo es claro y específico al indicar que se busca identificar las diferencias en el proceso de elaboración de tres tipos de chocolate.
- Medible: El objetivo es medible, ya que se puede comparar y contrastar el proceso de elaboración de cada tipo de chocolate y determinar las diferencias específicas.
- Alcanzable: El objetivo parece ser alcanzable, ya que es factible obtener información sobre los procesos de elaboración de diferentes tipos de chocolate a través de investigación y consulta de fuentes adecuadas.
- Relevante: El objetivo es relevante, ya que se enfoca en analizar las diferencias en el proceso de elaboración de diferentes tipos de chocolate y está relacionado con el objetivo general "Profundizar en el proceso de elaboración del chocolate y sus diferentes fases".
- Temporalmente definido: El objetivo no establece un marco temporal o una fecha límite específica para llevar a cabo la identificación de las diferencias en el proceso de elaboración de los chocolates.
A partir de este análisis, podemos identificar las siguientes mejoras a aplicar:
Elemento temporal: para hacer el objetivo aún más completo y ajustado a la técnica SMART, se podría añadir un elemento temporal, por ejemplo un plazo de tres meses. En este caso en concreto, valoramos con el alumno que no tenia sentido acotar el objetivo temporalmente ya que la propuesta no presentava dificultades extremas y con un buen calendario podia llevarse a cabo sin la presion de hacerlo en un plazo concreto.
Elemento específico: Analizando el objetivo nos dimos cuenta de que quizás era interesante añadir más especificidad, acotando el número de muestras que se tomarian para no desbordar la propuesta. Finalmente la formulación del objetivo quedó así:
"Identificar las diferencias en el proceso de elaboración del chocolate blanco, con leche y puro a partir del análisis de cinco muestras de cada tipo"
Un apunte final importante: la precisión con que apliques los criterios SMART depende de los recursos que tengas disponibles y las circumstancias en las que se va a desarrollar el trabajo, así como la precisión que quieras alcanzar en tu investigación. Se trata de una herramienta orientativa. Por otro lado, es normal que los objetivos generales sean algo más abiertos o abstractos, así que no hay necesidad de buscar acotarlos más, cómo si haremos con todos los objetivos específicos.
Hasta aquí el ejemplo paso a paso. Espero que te haya sido útil y te sirva como guía para formular tus propios objetivos del Treball de Recerca, TFG o TFM. ¡Si tienes dificultades o necesitas un apoyo, no dudes en contactarme!
