Colegio o centro educativo óptimo para nuestros/as hijos/as

En la elección de un centro escolar debemos valorar los siguientes factores:

Encuentra tu profesor ideal

1. Proximidad a casa o posibilidad de fácil acceso a dicho centro educativo
2. De titularidad pública; privada;  privada-concertada
3. De ideario religioso o laico
4. Tipo de proyecto educativo: Un proyecto educativo motivador del aprendizaje a través del juego, la participación activa y en armonía con el espacio o ritmo madurativo de los/as estudiantes.
5. Enseñanza bilingüe o monolingüe
6. Oferta de variadas actividades extraescolares
7. Etapas educativas ofertadas desde Infantil a Bachillerato o Infantil a Secundaria
8. Uniforme o ropa de calle
9. La comunión entre “Escuela y padres”: importante que ambos agentes compartan la misma línea educativa

Sin embargo, el factor más importante que interfiere en la elección del centro escolar de los/as alumnos/as son las “recomendaciones de la gente, de nuestro círculo de confianza”. Aunque el ofrecimiento en los últimos años de los centros escolares de “Jornadas de puertas abiertas” a las familias de potenciales estudiantes ha supuesto un factor más influyente que el resto en la elección de centro educativo.

Pero entre tanto factor a tener en cuenta en la elección del centro escolar conviene no olvidar el criterio más destacado o significativo: la capacidad de adaptación y flexibilidad de los/as niños/as y adolescentes para aprender al ritmo establecido por dicho centro educativo.

Aunque sea complicado reducir los factores a un número limitado y decisivo de factores a valorar en la elección de centro escolar he aquí algunos:

• Un docente mediador: Un/a profesor/a que acompañe al discente en su conocimiento, instigador/a de la formación más allá de las aulas y preocupado/a por la formación afectiva, moral y física de los/as estudiantes.
• Trabajo por proyectos y estímulo del “aprender haciendo”.
• Integración equitativa del trabajo individual con el trabajo cooperativo entre los/as alumnos/as. En este sentido, el trabajo cooperativo no es limitarse a actividades curriculares sino también a actividades extracurriculares como: Organizar una asamblea de alumnos semanal o crear un periódico escolar donde los/as alumnos/as asuman las funciones propias del trabajo en un diario…
• El aprendizaje a través del juego: Hay que fomentar el aprendizaje por diversión, por “placer” no por “castigo”. Es importante otorgar “libertad” en la medida de los posible a los/as alumnos/as para el desarrollo de su “autoaprendizaje”.
• Un currículum escolar flexible a integrar los temas de interés de los/as discentes.
• Adaptación y diseño del espacio educativo a las necesidades y deseos de los agentes educativos: docentes y estudiantes.

En otras palabras, se trata de elegir entre un centro escolar “tradicional o innovador”. Pequeños detalles son los que marcan la diferencia entre una “escuela tradicional y una escuela innovadora”, detalles como:

• Sustitución de las asignaturas tradicionales por proyectos multidisciplinares.
• Aulas con varios profesores simultáneamente.
• Asignaturas no limitadas a una hora de duración.
• Evaluación por competencias y no resultados.
• Preparación de jóvenes proactivos, independientes, expertos en nuevas tecnologías y plurilingües.
• Seguimiento de currículums educativos internacionales aunque dentro del respeto y reconocimiento al currículum nacional.
• Estímulo al desarrollo de “inteligencias múltiples” para que cada alumno pueda participar en su propia formación.
• Fomento del “aprendizaje significativo” en el que se alterna “individualización y socialización”, la interacción entre “adulto/tutor y niño/alumno”.

• Mayor inmersión con la realidad natural y entorno diario del alumno, haciendo que el estudiante tenga la sensación de “sentirse como en casa” durante su estancia en el centro educativo.
• Mayor dedicación y atención a la gestión del tiempo libre del alumnado.
• Nuevos criterios de agrupación del alumnado en aulas como el “nivel de autonomía” y no la edad necesariamente (Si los alumnos son agrupados por edad, ellos tenderán a competir pero si los alumnos son agrupados por habilidades, ellos tenderán a colaborar)
• Unos docentes desarrolladores del papel de “Guías-Acompañantes” más que de “Autoridades transmisoras de conocimiento”
• Oferta variada y a disposición del alumnado de diferentes fuentes de información como: Internet, libros, prensa, asistencia a museos… Es importante, en la sociedad de la información actual dejar que los/as estudiantes aprendan a seleccionar la información que precisan según las circunstancias.
• La posibilidad de asistir de forma gratuita por parte de los/as estudiantes a clases de refuerzo -extra tras el horario escolar programado oficialmente.

En síntesis, la escuela innovadora persigue el lema: “Naciste siendo original, no te conviertas en una copia”.