"No tengo tiempo para estudiar".
"Ya soy demasiado mayor para aprender".
"Tengo muchos vicios que no puedo corregir".
Estos son los principales retos que encontramos cuando vamos a enseñar inglés a adultos. Muchas veces solo somos procurados para dar clases de inglés en función de una demanda que parte del trabajo. Así que la motivación normalmente es baja y con eso, hay poco interés.
Empieza a dar clases de ingés a adultos
Consejos para dar clases de inglés a adultos
Hay una serie de formas de traer este adulto para un universo que lo involucre, pues la primera etapa para el aprendizaje es la disposición en estudiar. Una manera es introducir tópicos que están relacionados a su realidad, y así normalmente empezamos por su trabajo.
Aquí nos toca investigar todos los posibles temas que tienen conexión con su carrera y el local donde desarrolla sus funciones. Por ejemplo, si el alumno es experto en publicidad, vamos a empezar buscando materiales para clases de inglés que permitan con que la persona pueda comunicar su rutina, desafíos, misiones y logros de la empresa o si es autónomo, los objetivos de su trabajo.
Los tópicos de "Business" en general también nos ayudan en la búsqueda por temáticas interesantes, pues podemos tratar desde la inteligencia emocional y relacionamientos, hasta finanzas, mercado y economía. Pero siempre recomiendo hablar con el alumno antes de preparar las clases de inglés, enfocando en tópicos que le agraden.
Ahora en un segundo momento, está bien aproximarse del alumno tratando de cuestiones personales, como familia, interés por cultura y deporte u otro asunto especifico. Conocer sus libros, películas, series y cantantes favoritos te ayuda a preparar actividades más relajadas, pero que aun así enseñan. Y este es un punto importante: tener un objetivo de aprendizaje para cada clase. No pongas una canción que no va a agregar en la realidad del alumno o que no sea relevante para el contexto del aula.
Si volvéis a los retos que he escrito arriba, vais a percibir que aún tenemos que desarrollar estrategias para sanar estos problemas. En primero lugar está la falta de tiempo. La gran cuestión en realidad es la falta de organización. Todos trabajamos más horas que las que tenemos para cuidarnos.
Mi sugerencia es siempre incentivar el alumno a tener un plan personal de 20 minutos cada día para leer un artículo, mirar un video o escuchar un podcast, siempre de algo que no solo sea de su interés, pero que le enseñe cosas nuevas. Por ejemplo, si quiero aprender a sacar fotos, ¿porque no mirar un video explicativo en inglés en vez de mi lengua nativa? Tu nivel de concentración estará en el máximo, pues necesitas aprender algo útil para ti.
Adicionalmente, el factor de la edad sí que viene con limitaciones. Puede que tarde un pelín más en entender alguna pronunciación principalmente, pero cuando jóvenes no nos presionamos tanto en ser perfectos. Y es sobre esto que quiero hablar. Motiva a tu alumno a cometer equívocos. ¡Sí, exactamente esto! Ellos tienen que equivocarse cuando hablan.
Cuando notas un equívoco, apunta en un cuaderno. Al final de un discurso, enséñalo y pides que busque su error. Esta es una buena estrategia que, con el tiempo, hace con que el propio alumno esté consciente de sus errores o por lo menos que algo haya salido raro en alguna frase o expresión. Si no erramos, no nos damos cuenta de que habilidades necesitamos practicar más y ni tampoco accionamos nuestra escucha activa.
Por fin, los grandes villanos de los profes: ¡los vicios! Esta cuestión va a exigir mucho de ambos. Paciencia en identificar cuantos podáis y aún más paciencia en corregir siempre que haga falta. En este proceso, normalmente el alumno es el que no tiene tanta paciencia. Aún que digas que lo va a lograr y que es normal llevar algún tiempo, no se anima. Pues si pasa eso, es el momento de intentar técnicas de memorización.
Puede que no parezca, pero si ellos pueden conectar esto con algo relevante en su vida, difícilmente se irán olvidar. Por ejemplo, si no se acuerdan que "man" es singular y "men", plural, podemos buscar asociaciones. "A man" - hay dos letras "a". "Few men" - hay dos letras "e". Y esto puede seguir siendo un trabajo mutuo en que profesor y alumno van a intentar buscar mejores conexiones que ayuden a asimilar el conocimiento en las clases de inglés para adultos.
Más importante: ¡divertíos pues este es un momento de descontracción y nada mejor que tener pequeñas dosis de risa para hacer que todo el esfuerzo valga la pena!
Have fun!
Mari
