Cada lengua tiene sus dificultades, pero tranquilos! Nada es imposible!
Bueno si, hay lenguas más difíciles que otras, pero la verdad... depende de tu perspectiva. Por ejemplo, para un hispano-hablante no es tan difícil aprender Italiano (y al revés) porque hay muchas cosas similares. Si nos ponemos a pensar, en Italia hubo mucha dominación española y hay casos en que palabras de unos dialectos locales son más parecidas al español que al italiano nacional! ¿Pueden creerlo? Pero si, es la verdad. Eso significa que aunque hay cosas que parecen muy distantes, al final no lo son; solo tienes que acercarte un poco más y conocer mejor lo que antes mirabas desde lejos... y con un poco de miedo.
Lo único es no empezar al último momento a aprender italiano, como cada otra lengua. El estrés no ayuda para nada, y la cosa más importante para aprender bien es... la tranquilidad! Y encontrar la metodología correcta para ti (estudiar gramática, o hablar libremente con el tutor); no hay manera incorrectas, sino maneras personales.
La gramática es importante para construir las frases, pero la mayoría de las personas la consideran aburrida... pero necesaria. ¿Y si las clases fueran divididas en dos partes? Un poco de gramática, y mucha más conversación. Cómo comer verduras, y después consolarte con un montón de chocolate!
Toma la decisión de aprender Italiano, tomate tu tiempo (tu tiempo, porque no es una competición) y disfruta. Las cosas que se aprenden disfrutando, no las vas a olvidar nunca.
Entonces? ¿Os convenció mi artículo? Espero que sí
Saludos!
