Hace ya más de un mes desde que estamos confinados y creo que tanto profesores como alumnos nos hemos visto obligados a preguntarnos cómo seguir. Han puesto "en pausa" nuestras vidas, pero el curso académico sigue y no hay tiempo que perder. Voy a hablar de criterios que sigo para sobrellevar el encierro tanto como profesora como alumna, pues soy estudiante universitaria.
En primer lugar, quisiera hablar de la planificación. No aconsejo anticiparse al futuro, pues es incierto y agobiarnos pensando en cómo serán nuestros exámenes no nos hace ningún favor. Sin embargo, el caso contrario tampoco es recomendable. Lo ideal sería crearnos un planning semanal con objetivos a cumplir. Cuidado: estamos ante una situación complicada y nueva para todos, por lo que exigirnos lo mismo que antes del confinamiento sólo fomentaría nuestro agobio. Se trata de ponerse un ratito todos los días valorando nuestra salud mental. Esto es, dejándonos ratos de descanso, despejarnos haciendo deporte... Cualquier cosa que nos vaya a ayudar a ser más productivos a la larga.
Asimismo, es importante mantener una rutina de vida saludable. Acostarnos cada día a una hora parecida, comer de manera equilibrada, hacer algo de ejercicio... El desorden en nuestros hábitos llevará, muy probablemente, al desorden en nuestro trabajo. Una recomendación extra es procurar no quedarnos en pijama, sino vestirnos como si fuéramos a trabajar o a clase, aunque sea con ropa cómoda. Nos ayudará a sentir cierta normalidad.
En cuanto a los padres con niños pequeños, más de lo mismo. Debemos ayudarles a entender la situación y hacerles sentir amparados. Ayudarles con los deberes si se puede, fomentar su creatividad con juegos de mesa, dibujos o actividades al aire libre ahora que pueden salir un rato. En mi experiencia es lo que más ayuda a tenerles distraídos y que no sientan que están todo el tiempo haciendo deberes o en clases particulares. ¿Lo mejor? Que aprendan sin darse cuenta :)
Como profesora he de reconocer que es inquietante no tener toda la información que los alumnos querrían, pero considero que lo más importante es transmitir tranquilidad. Poco a poco nos darán pautas sobre los exámenes y, mientras, estaremos al otro lado de la pantalla para solucionar posibles dudas o explicar todo aquello que haga falta. Confiar en nuestros alumnos y crear un ambiente en el que se sientan a gusto también pienso que es fundamental.
Antes de concluir quiero hablar de mi experiencia como alumna. Han sido unas semanas de muchísima incertidumbre, de miedos, inseguridades y estrés. Hay que entender que es una situación nueva para todos y que los profesores hacen lo que pueden, pero qué difícil es a veces... Con las bibliotecas cerradas, clases online o directamente preparación de las asignaturas por cuenta propia ha sido complicado sobrellevar el ritmo académico. No obstante, voy aprendiendo, procuro trabajar en la medida de mis posibilidades, me apoyo en mis profesores y compañeros y confío en poder volver a una relativa normalidad pronto.
Estoy convencida de que vamos a poder con ellos, así que como conclusión sólo me queda decir una cosa: ¡mucho ánimo y paciencia a todos!
