En muchas ocasiones, es habitual encontrar alumnado con TDAH que presenta dificultades de aprendizaje en habilidades instrumentales como son la lectura, la escritura y el cálculo. Hay que diferenciar entre dificultades y trastorno de aprendizaje:
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Diferencias entre dificultades y trastorno de aprendizaje
- La dificultad de aprendizaje hace referencia a la disminución del ritmo y la calidad de los aprendizajes por diferentes motivos.
- El trastorno de aprendizaje está relacionado con alteraciones específicas de los mecanismos cerebrales necesarios, para el procesamiento de la información o de la expresión de los conocimientos adquiridos.
Los trastornos específicos del aprendizaje que influyen en el rendimiento académico de niños con TDAH según el DSM-5 son:
- Con dificultad en la lectura, si además afecta a la corrección de la lectura de palabras, a la velocidad o fluidez y a la comprensión.
- Con dificultad en la escritura, si además afecta a la corrección ortográfica, la corrección gramatical y de la puntuación, a la claridad u organización de la expresión escrita.
- Con dificultad matemática, si además afecta al sentido de los números, a la memorización de las operaciones aritméticas, al cálculo correcto o fluido y al razonamiento matemático correcto.
¿Cuáles son las causas de esta correlación entre TDAH y los trastornos del aprendizaje?
En el caso del retraso en el proceso lector, una de las causas más frecuentes es la falta de automatización en la conversión de grafema-fonema, lo que hace que el niño o la niña, destinane sus escasos recursos cognitivos a la decodificación, lo que provoca que cuando está leyendo un texto, esté más pendiente de reconocer las palabras que de comprender lo que lee.
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En cuanto al retraso en la escritura, se trata de un proceso complejo que incluye habilidades visuo-perceptivas, de programación motora y de coordinación motora fina. También tienen un papel fundamental las habilidades cognitivas táctiles y la atención sostenida, que están muchas veces afectadas por el TDAH, dando lugar a la disgrafía.
Por último, en el caso de las dificultades matemáticas, hacen referencia a la capacidad en el manejo de conceptos, datos numéricos, para el cálculo y razonamiento matemático. Los niños con TDAH son especialmente vulnerables a la aparición de retraso del proceso de aprendizaje de las matemáticas. En el correcto aprendizaje de las matemáticas interaccionan diversos procesos cognitivos como son: memoria semántica, memoria de trabajo, habilidades perceptivas y sentido numérico. En el caso de los niños con TDAH, la naturaleza de su vulnerabilidad para tener asociada una dificultad matemática, viene dada por la afectación de la memoria de trabajo, característica de estos niños, así como una deficiente automatización de las operaciones aritméticas, asociadas a una velocidad de procesamiento lenta.
Por todo lo expuesto hasta ahora, es muy importante tener en cuenta a nivel de centro educativo y de recursos externos que trabajen con el niño o la niñas con TDAH, la relación del TDAH con la dificultad en estos procesos de aprendizaje, ya que esto ayudará a la mejor planificación de las tareas, a conseguir los objetivos propuestos y repercutirá de manera muy positiva en la autoestima del niño o niña con TDAH, que verá recompensados sus esfuerzos.
